SARA

Siempre he dicho que para mí los niños más "desfavorecidos", son los que más me enseñan, los que más quiero. Es como si tuviese la misión de protegerles, de darles todo mi cariño, de ayudarles...

En este colegio que estoy ahora, en la clase de 3 años B está Sara, una niña con poblemas motores, recuerdo que a principio de curso, el Equipo Directivo nos comunicó que iba a venir una niña con muchos problemas, el principal era su reducida movilidad. Hubo caras de preocupación, ojos que buscaban a ver quien iba a ser quien "se llevaba el marrón" de tenerla en su clase.

Se inició el curso, yo andaba como loca buscando un hueco para poder ir a verla, pero no había forma. Cuando ya me dieron mi horario de Inglés, me di cuenta que los lunes pasaría a esa clase asi que me alegré de sobremanera...entré el citado día, me encontré con 15 niños que andaban coloreando una ficha, todos utilizaban colores muy vivos. Por ser el primer día y porque me resultaba muy violento empezar a darles inglés a niños tan pequeños, decidí que las dos sesiones semanales que tenía con esa clase, hasta mediados de octubre, lo que iba a hacer sería, será hacer de profesora de refuerzo, de apoyo... Una vez que ya estaba en la clase, fui buscando a Sara, pregunté a su profe dónde estaba y ella me señaló el cuarto de baño, me acerqué sigilosamente, haciéndome una idea mental en lo que me iba a encontrar (la habían puesto como casi un monstruo) y con lo que me encuentro es con una niña de ojos gris-azulado, con el pelito negro que me mira y sale andando deprisa para darme la mano...¿de verdad era aquella niña la que se nos había descrito en el claustro de profesores? la pregunta la debí hacer en alto porque su profe me dijo "sí, yo pensaba que iba a venir en cochecito, sin poderse mover y mira..." Pero lo que me chocó realmente es que, no me conocía de nada y enseguida me dió la mano, sin conocerme...

He querido compartir con vosotros este post porque de algún modo quiero homenajear a esos niños que, pese a ser "diferentes" a los demás nos enseñan día a día a sonreirle a la vida, nos enseñan a ser personas... son mis verdaderos maestros!!!!.

** Dedicado a Adrían, Juanma y por supuesto, a la pequeña Sara.