jueves, 3 de julio de 2008

Prisionera de las horas



Ya no sé muchas veces còmo sacarle más jugo a las horas que tiene el día, sé que no soy la única persona a la que le ocurre esto, pero es tan grande el agobio que siento por no poder hacer más cosas en 24 horas, que me sumo en una pequeña gran tristeza.

Cuando estoy haciendo algo, no me fijo mucho en la hora quemarcan las agujas del reloj, empiezo a hacerlo y hasta que no termino, no levanto la cabeza en busca de este artilugio llamado reloj, y no será porque en mi habitación no tenga, está el de mi minicadena, el reloj de pulsera que hace un par de años me regalaron y que uso a diario, el reloj del móvil, el de un pequeño despertador de viaje que no sé cómo aún no ha salido volando por la ventana debido a su chirriante alarma... ahhh y se me olvidaba,el relojito que aparece abajo a la derecha del ordenador...

No puedo vivir sin reloj, pero tampoco me gusta depender de él, es una ambigüedad enorme, lo sé, pero ¿quien no se encuentra raro cuando no lo lleva puesto en la muñeca?.

El paso de las horas significa dos cosas, una,que has vivido una hora más, otra, que te queda una hora menos, ésta es la que realmente me preocupa, el ver pasar las horas y el desaprovecho que hago muchas veces de ellas. Muchas veces pienso en que he desaprovechado momentos increibles de mi vidad por cuestión del tiempo.

Ójala pudiera borrar ese pasado y volver a vivirlo, recuperar las horas perdidas pero, bajando a la tierra, ya sé que esto es imposible.

Ayer sin ir más lejos, me tiré toda la tarde estudiando y haciendo parte de la memoria de prácticas que en unos días, tengo que entregar y creo, que me hubiera sido más provechoso el haber salido a la calle y que el aire, aunque cálido, me hubiera dado en la cara, porque siento que ayer perdí horas fantásticas de mi vida.

Pero no todo es pesimismo, también he tenido momentos en los que hasta yo misma me quedaba perpleja de lo que me daban de sí los minutos, era increible observar que, en tan sólo veinte minutos me había dado tiempo a realizar varias cosas. ¿ Por qué ahora no me ocurre esto?, cuando más necesito estirar las horas, menos elásticas son.


Ójala tuviera la receta mágica de parar, aunque fuesen unos segundos, el tic tac de los relojes...